El aparente robo a mano armada a una estudiante, en una esquina del barrio Ceferino, provocó momentos de tensión cuando parte de la familia de la joven, comenzó a apedrear una vivienda donde presuntamente se refugiaron los agresores, que serían menores de edad.
El padre de la joven de 19 años, en dialogo con lu15 indicó que «mi hija iba a la escuela, antes de las 7 de la mañana, a rendir cuando dos menores, un chico y una chica, salieron de una casa de calle Honduras, la golpearon muy fuerte en el estómago y le robaron la mochila y el celular. Aparentemente estaban armados».
La llegada de la policía no calmó los ánimos, ya que algunos jóvenes quisieron apedrear los móviles mientras los uniformados trataban de liberar el lugar, impidiendo incluso, de manera descortés, trabajar a la prensa presente.
Se aguarda la evolución de los hechos.