La gran mayoría de las hortalizas que los rionegrinos consumen a diario son producidas por familias o grupos de trabajo de la colectividad boliviana. Según el cónsul de Bolivia Nestor Condorí, ese dato es avalado por “organismos y sectores vinculados a la producción” de la provincia.
El sitio especializado agendaeconomica.com.ar destaca que “desde hace dos décadas, las hortalizas que consumen a diario los rionegrinos son generadas por el trabajo de la colectividad boliviana. El 80% de las verduras tienen ese origen productivo en la provincia”
En el estudio estadístico se indica que los trabajadores bolivianos fueron ocupando superficies productivas que dejó la explotación frutícola. “Alquilan a un valor de entre $10.000 y 15.000 la hectárea o pagan con cosecha: 300 ó 400 bolsas de cebollas, ya que en promedio su productividad es de 1.500 a 2.000 bolsas en ese espacio”.
Desde la representación consular estiman que no solo trabajan con verduras. “Muchos apuntan hacia otros horizontes. Se expandieron hacia la albañilería, tiendas de ropa económica y labores en fruticultura” indican.
Se estima que en Río Negro se radicaron unas 6.000 familias bolivianas, según registra el consulado en Viedma. Agenda Económica señala que “toda la producción (excepto la cebolla, que se exporta en un 90% de su volumen) se comercializa en el mercado local. Los productos regionales compiten en calidad y costos con las verduras que llegan desde el norte del país”
Como ejemplo se indica que en Río Colorado, algo más de 150 familias bolivianas trabajan cerca de 1.000 hectáreas, en su gran mayoría alquiladas por temporada. Son las propias familias las que realizan todo el circuito productivo, que culmina con la venta en comercios, verdulerías propias o en los puestos de las ferias cada fin de semana.
Una ingeniera agrónoma consultada por el sitio económico destaca que los trabajadores bolivianos “llegan a estas tierras desde hace dos décadas, traen las características de la cultura de su país. Son fuertes en cebollas y papas, que es donde se sienten más cómodos. Con el tiempo comenzaron a incursionar directamente en la horticultura, que no estaba siendo tan explotada en toda nuestra región. Se fueron asesorando, vieron el hueco y con muchas horas de trabajo se instalaron como los principales impulsores de la horticultura”
Fotografia Agenda Economica